¿CÓMO PODER HACER PIERCINGS O TATUAJES CON DIABETES TIPO 1?

Para todas las personas que tenemos diabetes tipo 1 es conocido que existen muchos mitos y prejuicios relacionados con los piercings y tatuajes y tener diabetes tipo 1. En muchas ocasiones nos van a intentar convencer de no hacerlos, o directamente nos habrán dicho que por tener diabetes tipo 1 no podemos hacerlo.
Considero importante aclarar que sí podemos hacernos tatuajes y piercings, pero si o si debemos tomar en consideración muchos más factores y cuidados que una persona que no tiene diabetes, ya que, por supuesto existen ciertos riesgos asociados, ya que se trata de heridas abiertas en la piel y como ya lo sabemos gran parte de las personas con diabetes, podría tener asociados problemas de circulación, cicatrización, y mayor riesgo de generar una infección.
Es por esto que las personas con diabetes debemos considerar los siguientes ámbitos a la hora intervenir en nuestra piel:
Antes de:
✓ Procurar que nuestra hemoglobina este en un nivel igual o menor a 7.0
✓ Procurar que la glicemia promedio sea igual o menor a 140 mg/dl en los 14 díasprevios al tatuaje o piercing.
✓ Conseguir aprobación de médico tratante
✓ Procurar elegir un lugar seguro en cuanto a los materiales que utilizan y que ofrezcagarantías de higiene.
El día D:
✓ Estar siempre acompañado de alguien que conozca de diabetes y nuestros síntomas
✓ La persona que nos hace el tatuaje o piercing debe saber que tenemos diabetes
✓ Ingerir carbohidratos antes de ingresar para evitar hipogicemias. Para esto debemostener conocimiento de cuánto durará la sesión.
✓ Tener nuestra máquina de glicemia a mano durante la sesión “por si acaso”
Después de:
✓ Controlar que el área alrededor del piercing no se ponga roja, duela, se inflame o segrega un líquido amarillento (pus). Si la piel presenta ese aspecto es probable que se haya infectado y convendrá retirar el piercing e ir al médico inmediatamente para iniciar el tratamiento adecuado.
✓ Si el color rojo de la zona del tatuaje no disminuye poco a poco o se vuelve dolorosa, acudir al médico para descartar una infección. Si se tarda en acudir al médico, costará más controlar la infección y aumentarán los riesgos.
✓ Si se infectan el piercing o el tatuaje, aumentar la frecuencia de controles de glucosa y hacerse el test de cetona. Si los niveles de azúcar son altos y hay cetonas en sangre u orina, hay que acudir al médico inmediatamente.
✓ Ingerir la cantidad de comida y líquidos adecuada a las pautas habituales. Un piercing en el labio o en la lengua puede producir incomodidad a la hora de beber y comer durante algunas semanas. Esto puede hacer que sea difícil mantener los niveles de glucosa ajustados.
Si la persona con diabetes tiene un buen control glucémico, su enfermedad no debería ser un impedimento para realizarse un piercing o un tatuaje, siempre que sea en las condiciones adecuadas y tomando las precauciones necesarias.